Los sensores implantables son más pequeños que un grano de arroz y están formados por un andamio de hidrogel que es flexible como una lente de contacto.
Un procedimiento médico que separa a los pacientes en diferentes grupos La medicina personalizada es un paso más para los consumidores, al crear un sensor implantable que advierte antes de que se desarrollen problemas de salud en el cuerpo humano. Los científicos están desarrollando y han comenzado a comercializar su primer dispositivo en Europa y esperan obtener la aprobación de este en los EE. UU.
“Otros sensores implantables actualmente en el mercado tienen un inconveniente significativo”, dice Natalie A. Wisniewski, Ph.D. "A menudo provocan una respuesta inmune de 'cuerpo extraño' que recubre el sensor con células inflamatorias o tejido cicatricial". Ese recubrimiento puede aislar el dispositivo de los capilares y evitar que detecte los cambios químicos con precisión, por lo que deja de funcionar después de unas semanas o meses.
"Los investigadores también se aseguraron de que su sensor carezca de superficies planas, lo que es un claro indicio para las células de que un objeto no es natural", dice Wisniewski, que está en Profusa Inc. También anunció que el primer sensor implantado en voluntarios humanos es sigue funcionando después de más de 4 años. Por lo tanto, las células y los capilares crecen en la estructura del sensor sin permitir la respuesta inmune indeseable.
El hidrogel es la formulación a base de poli (metacrilato de 2-hidroxietilo). El mismo polímero que se utiliza en la fabricación de lentes de contacto blandas. Los investigadores cubrieron el andamio de hidrogel con las moléculas de tinte que responden a la concentración de un analito como oxígeno, co2, glucosa o lactato en la sangre.
Se coloca un pequeño detector contra la piel, que emite luz infrarroja cercana a través de la piel. Hace que las moléculas de colorante tengan una fluorescencia más o menos brillante según la concentración del analito. Esa luz fluorescente no es visible para el ojo humano, solo puede ser vista por un detector que envía de forma inalámbrica la medición del cambio en el brillo (a medida que la concentración de analito fluctúa con el tiempo) a la computadora o al teléfono móvil para registrar el cambio. Se ha demostrado que informa los niveles de oxígeno en los tejidos en pacientes en tratamiento por enfermedad arterial periférica, que afecta a millones de personas en todo el mundo. Esta enfermedad afecta el nivel de oxígeno lo que provoca la amputación. Entonces, para prevenir la amputación se usa este dispositivo. Ayuda al informar al médico sobre la disminución de los niveles de oxígeno en las extremidades del paciente.
La modificación de esta idea es rastrear múltiples químicas corporales al mismo tiempo. “Los sensores proporcionarían un registro continuo de sus analitos en relación con su línea de base personal”, explica Wisniewski. "Luego, si algo sale mal, se marca temprano, antes de que sienta los síntomas, para que pueda llegar al médico a tiempo para recibir tratamiento".
Wisniewski dice que “el ejército también está interesado en estos dispositivos y ha brindado apoyo desde el inicio de la empresa. Ellos prevén que el uso del sensor sea efectivo para los soldados y los atletas. Esta investigación cuenta con el apoyo de varios organismos gubernamentales, Institutos Nacionales de Salud (NIH) y la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA).